Ignorar al niño: qué significa y cómo usarlo para manejar el mal comportamiento

La atención de los padres es muy gratificante para los niños. Esta atención puede ser tanto positiva como negativa. La atención positiva se refiere a las cosas que hace para hacerle saber a su hijo que a usted le agrada algo que ha hecho. Pueden ser elogios, abrazos, palmadas en la espalda o un “choca la mano”. Si su hijo ata los cordones de sus zapatos por sí solo, podría elogiarlo por hacer un buen trabajo con eso. La atención negativa tiene lugar cuando le presta atención al niño por algo que no le agrada, como cuando lo regaña o le grita. Si el niño le jala la camisa y llama, usted podría decirle que se “detenga”. En este ejemplo, usted le ha brindado atención a su hijo. Puede que descubra que da más atención a las conductas negativas que a las positivas porque tiene prisa o está corto de tiempo. Esto sucede en muchas familias. Pero en el caso de los niños, la atención negativa que obtienen de usted sigue siendo atención. Ignorarlos funciona porque quita la atención de las conductas que desea que disminuyan. Su hijo aprende que no recibirá atención si se comporta mal.

¿Qué es ignorar?

Que no lo engañe el término ignorar. Es un proceso muy activo para los padres. Piense en ignorar como lo opuesto a prestar atención. Cuando usted ignora a su hijo, no lo descuida ni permanece al margen mientras él se comporta mal. En vez de eso, usted aparta de él y de sus acciones toda su atención. Esto, por lo general, ayuda a detener las conductas que su hijo usa para llamar la atención. Estas conductas incluyen cosas como hacer berrinches, quejarse e interrumpir. Cuando lo ignora, usted no mira a su hijo ni habla con él. Ignore todas las protestas o excusas para atraer su atención. El objetivo es disminuir las conductas que no le agradan o que desea que su hijo detenga.

¿Por qué debo ignorar el mal comportamiento de mi hijo?

Porque eso lo puede ayudar a reducir el mal comportamiento de su hijo. Recuerde que a los niños les encanta que les presten atención. La atención negativa —como gritarles— es muy gratificante para ellos. Esto es así en particular si usted no le estaba prestando atención antes de que comenzara a portarse mal. Al brindarle atención durante un berrinche, usted podría, accidentalmente, recompensar la conducta y aumentar las probabilidades de que la repita. Cuando ignora algunas malas conductas, puede disminuir la probabilidad de que el niño se comporte de la misma manera otra vez.

¿Qué malos comportamientos debo ignorar?

Por lo general, ignorar funciona mejor con comportamientos irritantes como los quejidos y llantos, cuando el niño no tiene ningún problema físico ni nada que le duela, y los berrinches. Estos malos comportamientos por lo general buscan atención. Si los padres, amigos, familiares u otros cuidadores ignoran esas conductas de forma sistemática, con el tiempo se detendrán.

Su hijo también puede comportarse mal sin que busque llamar la atención, y ponerse en peligro. Las conductas peligrosas y destructivas no deben ignorarse. No puede ignorar, por ejemplo, si su hijo se está lastimando, hiriendo a otra persona o destruyendo objetos. Estas malas conductas deben detenerse de inmediato. Deben usarse otras medidas disciplinarias y consecuencias, como el tiempo fuera. Haga clic aquí para obtener más información sobre otras medidas disciplinarias y consecuencias, y el tiempo fuera.

¿Cómo ignoro conductas?

• Escoja una conducta específica que desee ignorar. ¿Cuál es la que causa más problemas? Comience a ignorar esa conducta en lugar de responder como siempre lo hace.
• Cuando su hijo presente la conducta elegida, quítele toda su atención. Permanezca en silencio y hágale pensar que no puede verlo ni oírlo. Incluso puede darle la espalda para que el niño no lo vea mirándolo. Puede observarlo de reojo por si observa una buena conducta. Incluso cuando lo ignore, lo primero es su seguridad. No deje a su hijo solo a menos que esté a salvo.
• Mientras lo ignore:
  • No lo toque ni lo abrace.
  • No hable con él.
  • No lo mire.
• Ignore la conducta sin ceder. Ignórela cada vez que se produzca. Es importante tener constancia e ignorar la conducta cada vez que tenga lugar, a fin de disminuirla o detenerla.
• Ignore la conducta durante todo el tiempo que ocurra. Una vez que comience a ignorar esa conducta, debe seguir ignorándola y no ceder.
• Pero al ignorar a su hijo usted no le está diciendo lo que quiere que haga. Espere que la mala conducta se detenga y entonces vuelva a prestarle atención rápidamente. Use atención positiva y elogios para decirle lo que le agrada de lo que está haciendo, incluso si solo está sentado en silencio. Al elogiar un buen comportamiento, hágalo con entusiasmo y sea específico. En otras palabras, dígale lo que le gusta de su conducta. Podría decirle, por ejemplo: “Me gusta mucho que me hayas pedido con voz calmada, como un niño grande, que te ayudara a atarte los zapatos”.

Vea unos consejos para ignorar y lea unos ejemplos »