Información sobre los brotes de tosferina

English: About Outbreaks

La tosferina (tos convulsiva o pertussis) es una enfermedad común (endémica) en los Estados Unidos, donde se dan cantidades máximas de casos reportados cada 3 a 5 años y brotes frecuentes. En el 2014, el año más reciente en el que se alcanzó un punto máximo, se reportaron 48 277 casos de tosferina; y muchos más no son reportados. La meta principal de los esfuerzos para controlar los brotes de tosferina es disminuir la morbilidad (cantidad de casos de la enfermedad) y la mortalidad (muertes) entre los bebés. Una segunda meta es disminuir la morbilidad entre las personas de todas las edades.

Identificación de brotes de tosferina

Los brotes de tosferina pueden ser difíciles de identificar y controlar. Existen otros agentes patógenos (gérmenes) respiratorios que a menudo causan síntomas similares a los de la tosferina y esta enfermedad puede circular junto a otros agentes patógenos (bacterianos y virales) en ciertas ocasiones. Las pruebas de reacción en cadena de la polimerasa (RCP) se usan comúnmente para diagnosticar la tosferina. Las pruebas de RCP varían en su capacidad para mostrar correctamente quién no tiene esta enfermedad (especificidad). Esto es importante porque si una prueba tiene una especificidad alta y alguien da positivo, entonces es muy probable que de verdad tenga la enfermedad. Como las pruebas de RCP varían en especificidad, se recomienda obtener la confirmación con un cultivo (una prueba de laboratorio donde se multiplican las bacterias) al menos en uno de los presuntos casos cada vez que se sospeche de un brote de tosferina. Se han presentado brotes falsos (pseudo) de tosferina debido a resultados falsos positivos en las pruebas de RCP. Esto destaca la importancia de reconocer los signos y síntomas clínicos, y de hacer los análisis de laboratorio en forma cuidadosa.

Cómo proteger a los bebés durante brotes de tosferina

Para reducir el riesgo de tosferina en las mujeres que acaban de dar a luz y en sus bebés pequeños, los CDC recomiendan que las mujeres embarazadas reciban la vacuna Tdap en cada embarazo, idealmente entre las semanas 27 y 36 de gestación (en inglés). Durante los brotes, los esfuerzos de prevención deben centrarse en mejorar las tasas de vacunación con la Tdap en las mujeres embarazadas para reducir los casos de enfermedad grave y posibles muertes en bebés vulnerables.

Uso de antibióticos durante brotes de tosferina

A medida que ocurran más casos y la tosferina se propague por las comunidades, puede que no sea eficaz que los departamentos de salud pasen mucho tiempo y gasten muchos recursos buscando a las personas expuestas a esta enfermedad (rastreo amplio de contactos) y dándoles antibióticos para ayudar a prevenir la infección (profilaxis antimicrobiana posexposición, o PEP, por sus siglas en inglés). Aunque los antibióticos pueden prevenir la enfermedad de la tosferina si se toman antes de que comiencen los síntomas, no hay datos que muestren que el uso amplio de la PEP entre los contactos de las personas con tosferina funcione para controlar o limitar el tamaño de los brotes de esta afección. Otra consideración importante es el uso excesivo de los antibióticos; los CDC participan en la promoción activa del uso adecuado de los antibióticos entre los profesionales de la salud y los pacientes. Con estas consideraciones en cuenta, los CDC apoyan dirigir la PEP a las personas con alto riesgo de contraer un caso grave de tosferina y a quienes tendrán contacto cercano con ese tipo de personas como los bebés. Vea las directrices para la PEP (en inglés).

Detección sistemática activa durante brotes de tosferina

Durante los brotes, se puede considerar la detección sistemática activa en los pacientes sintomáticos con presuntos casos de tosferina, en lugares como escuelas, guarderías infantiles y hospitales. La detección sistemática activa de presuntos casos posiblemente reduzca la exposición a personas con tosferina, aliente la evaluación médica oportuna y el tratamiento de los casos, y promueva la pronta administración de antibióticos a los contactos cercanos de alto riesgo.